Profundo dolor en la comunidad saladillense: En horas de la mañana de hoy miércoles, falleció Marcos Delia

Saladillo/BA. En horas de la mañana de este miércoles 15 de marzo, fallecio Marcos Delia, conocido empresario saladillense.

Abogado de profesión, Marcos se dedico con muy bajo perfil, a acompañar a su padre, Don Francisco «Foco» Delía. en la agencia de automotores Chevrolet, para luego dedicarse de lleno a conducir los destinos del hotel «Esquina del Sol».
Hasta aquí, podría ser la nota necrologica, como una breve reseña de su actividad, truncada a muy temprana edad, ya que estaría cumpliendo 57 años el próximo mes.

Pero hay valores humanos que no se pueden dejar de destacar, y que sin ninguna duda, será la herencia más importante y trascendente que dejará a su numerosa familia.

Una palabra muy usada en estos tiempos es la empatía, pero convengamos que es muy escasamente puesta en practica. Marcos fue una persona solidaría, el hombre que tendía la mano muchas veces en forma anonima, el empresario que cumplió el papel de amigo, aún con personas que no trataba habitualmente.

Profundamente creyente en Dios, los domingos era un fiel concurrente junto a su esposa e hijos a las misas que se celebraban en el Templo de la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción. Estaba siempre que alguien lo necesitaba, faltaba casi siempre para la foto, no le gustaba mostrarse y mucho menos, cuando le daba una mano a alguien que se lo solicitaba.

Sufrió mucho la muerte de su padre, como el querido «Foco» sufrió cuando supo de su dolencia. Don Francisco y Olga, su mamá, le inculcaron valores que Marcos supo atesorar, entre ellos el que mas lo destaco, la humildad por sobre todas las cosas, detalle que no paso desapercibido para una comunidad que lo despide con cariño, pero con una frase generalizada, «que gran persona fue Marcos».

«Que regalo de Dios fue haberte conocido querido Marcos, seguramente Dios tendrá un lugar muy especial para vos, esos espacios reservados solamente para quienes pasaron por este mundo entregando su corazón, un Don que te hizo grande, inmenso, y fue mucho más allá de tu actividad profesional y empresarial».  

Se te va a extrañar, esos lugares que dejan vacios seres humanos como vos, no son para nada faciles de reemplazar. Que el Amado Dios te reciba en su regazo. Descansa en PAZ. (César Morón).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *